La Comisión de Fomento ha visitado hoy, a petición de los grupos parlamentarios Bildu, Aralar-Nabai e I-E, las obras de recrecimiento del pantano de Yesa. La inspección se ha centrado en la zona afectada por el deslizamiento de la ladera derecha del embalse, cuya repercusión sobre dos urbanizaciones ha provocado el desalojo preventivo de 60 viviendas en la localidad de Yesa.
 

Los miembros de la Comisión de Fomento que han asistido han sido José Antonio Rapún, Carlos García Adanero, Jesús Esparza, Amaya Otamendi, Jerónimo Gómez (G.P. UPN), Samuel Caro, Maite Esporrín (G.P. Socialistas de Navarra), Víctor Ruiz, Koldo Amezketa (G.P. Bildu), Eloy Villanueva (G.P. PPN), Marisa de Simón (G.P. Izquierda-Ezkerra) y Patxi Leuza (no adscrito).
 

La delegación del Parlamento ha sido recibida por Xavier de Pedro y Raimundo Lafuente, presidente y director técnico, respectivamente, de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), organismo autónomo adscrito al Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.
 

El objeto de la visita, según ha constatado Koldo Amezketa, ha sido “conocer in situ la situación real de la obra, habida cuenta la inquietud y las dudas surgidas entre la ciudadanía y las autoridades municipales de los pueblos situados aguas debajo de la presa, debido a los movimientos de tierra producidos”.
 

Seguidamente, los Parlamentarios han recorrido las obras del embalse para, de la mano de los responsables de la Confederación Hidrográfica del Ebro, conocer el objeto y alcance de la intervención que, desde primeros de febrero, ha permitido estabilizar la ladera derecha del pantano.

Según ha explicado el presidente de la Confederación del Ebro, Xavier de Pedro, los trabajos continúan a buen ritmo y se desarrollan dentro de los plazos previstos. El objetivo, en cualquier caso, es “detener el movimiento, evitar que reaparezca y garantizar la seguridad”, todo dentro de una política de “transparencia” que les lleva a “informar semanalmente” al Gobierno de Navarra y a los ayuntamientos de Sangüesa y Yesa”.
 

De Pedro ha precisado que han sido las “revisiones” que periódicamente se realizan a la presa las que han permitido “detectar” el citado deslizamiento, debido al cual se recomendó “adelantar los trabajos” que ya estaban programados. Este movimiento, que “a principios de febrero alcanzó una velocidad máxima no homogénea de hasta 4 cm/semana, se ha ralentizado hasta 0,4 cm/semana”.
 

Los trabajos de estabilización que se acometen desde hace dos meses están presupuestados en 10 millones y consisten en una excavación de descarga en la zona superior que, hasta el momento, ha permitido retirar 350.000 m³ de tierras. De ello se encarga una brigada de “50 personas repartida en dos turnos de 10 horas” diarias.
 

De Pedro ha insistido en que los técnicos del Organismo de cuenca continúan con el seguimiento topográfico que, a base de sondeos, estudios piezómetros e inclinómetros, permite descubrir cualquier variación en el paleodeslizamiento latente detectado en las laderas del embalse, lo que posibilita “reaccionar rápidamente ante cualquier cambio significativo”.
 

El inicio del cuerpo de la presa, a finales de año

De Pedro ha confirmado que este año, y especialmente el próximo, se dará un impulso definitivo a las obras de recrecimiento del Pantano de Yesa, con el objetivo que estén concluidas, según la programación comprometida por el Ministerio, a finales de 2016.
 

Los trabajos en ejecución se centran en la electrificación del desagüe de fondo y de la galería de la toma del Canal de Bardenas. Además, se han finalizado más de 7 kilómetros, de un total de 24, del camino de acceso a la zona de préstamo de gravas para el cuerpo de la presa, se está deforestando este área y se está trabajando en las obras de drenaje de la nueva vía.
 

También se ha instalado la planta de inyecciones para ejecutar los tratamientos de la cimentación de la presa y en verano se procederá a montar las instalaciones para la obtención de áridos. Desde el Organismo de Cuenca, una vez finalizadas las impermeabilizaciones necesarias, se prevé que a finales de este año o principios del siguiente se inicie la construcción del cuerpo de presa.
 

El recrecimiento del embalse de Yesa supone una inversión, según su presupuesto total vigente, de 255.190.114 euros, de los que se han invertido 106.674.402 (con revisión de precios e IVA actualizados). También se han invertido 23.335.000 euros en el proyecto de Obras Complementarias y 4.407.859 en la reposición de la carretera A-1601.

El recrecimiento de la presa de Yesa, en el río Aragón (Navarra/Zaragoza), es una obra incluida en el Pacto del Agua. Esta actuación será la garantía del abastecimiento de agua a Zaragoza y su entorno; consolidará la zona regable de Bardenas y cubrirá los abastecimientos de esta zona; aportará el caudal ecológico del río Aragón; permitirá la laminación de avenidas; y cubrirá todas las concesiones existentes aguas abajo.

De Pedro ha concluido reconociendo que en torno a la presa “hay un debate político a favor y en contra del recrecimiento. Nosotros, pese a ello, sólo somos responsables de acometer la obra conforme a las normas de seguridad establecidas”.

Los portavoces de la Comisión de Fomento han valorado de forma dispar las explicaciones del presidente de la CHE y, en lo tocante a los deslizamientos de la ladera que han provocado el desalojo preventivo de 60 viviendas, han insistido en la necesidad de garantizar la “seguridad” de personas y bienes por encima de cualquier otra consideración.

Carlos García Adanero (G.P. UPN) ha valorado la “rápida actuación del Gobierno y la CHE para controlar la situación originada por el deslizamiento de tierras. No hay motivos para el alarmismo, hay expertos en la materia que controlan la seguridad a diario. Las obras de recrecimiento de la presa continúan, algo importante, porque se trata de una infraestructura que tendrá repercusiones positivas en diversos ámbitos”.

Maite Esporrín (G.P. Socialistas de Navarra) ha instado a mantener la guardia en lo relativo a la “seguridad, algo que con los desalojos y las posteriores labores de corrección se está consiguiendo. Eso es lo prioritario, hay que medir constantemente los desplazamientos para vigilar que nadie corra peligro. Estamos conformes con el método de trabajo. Y en cuanto al recrecimiento, nada que objetar”.

Víctor Rubio (G.P. Bildu) ha mostrado sus “reservas” sobre la información que se les ha facilitado, porque “la realidad de los últimos años demuestra que ambas laderas son inestables, lo cual pone en solfa la presunta seguridad de esta obra. Ni siquiera la CHE es capaz de ofrecer explicaciones que aclaren el origen de los movimientos y eso acentúa las dudas. Lo único evidente es que la tierra alrededor del pantano se está moviendo”.

Eloy Villanueva (G.P. UPN) ha apuntado que “las soluciones técnicas adoptadas por la CHE para preservar la seguridad de vecinos, familias e infraestructuras afectadas por los deslizamientos parecen las adecuadas. Tenemos plena confianza, van a seguir trabajando en la resolución del problema. Por otra parte, el PPN reitera su apoyo al recrecimiento, porque se trata de una obra beneficiosa para Navarra y básica para la comarca, pues incrementa las posibilidades de riego y abastecimiento y previene las avenidas de aguas”.

Marisa de Simón (G.P. I-E) ha señalado que “se está actuando con diligencia para estabilizar el terreno de las viviendas afectadas y se está investigando la causa de los corrimientos, pero sorprende que haya urbanizaciones en esa zona. Seguimos pensando que hay que paralizar las obras de recrecimiento hasta no tener la certidumbre de que dichos movimientos no se van a reproducir”.

Patxi Leuza (no adscrito) ha lamentado que no se les hayan dado “grandes explicaciones acerca de los deslizamientos. No hemos escuchado nada que no supiéramos. Dicen que lo tienen bajo control y te lo tienes que creer, pero el tiempo dirá si persiste o no el peligro. Su intención es seguir adelante y terminar la obra, eso ha quedado patente”.