Homenaje a los Reyes de Navarra con la asistencia de Sus Altezas Reales los Príncipes de Asturias y de Viana
El Presidente del Parlamento, Alberto Catalán, ha formado parte del cortejo que les ha acompañado para depositar ante el sepulcro de los primeros soberanos una corona de flores rojas
Sus Altezas Reales los Príncipes de Asturias y de Viana han participado esta mañana en el tradicional Homenaje a los Reyes de Navarra que ha tenido lugar en la iglesia del monasterio de Leyre, tras el acto de entrega del Premio Príncipe de Viana de la Cultura 2013 a Daniel Innerarity. Al acabar la celebración litúrgica, D. Felipe de Borbón ha depositado una corona de flores rojas ante el sepulcro que guarda los restos de los primeros reyes de Navarra.
El acto ha comenzado a las 12,15 horas, en la plaza de los ábsides, junto a la puerta del Monasterio, con la formación del cortejo, formado por los alguacilillos que portan la corona de flores para la ofrenda; el ujier que lleva la urna de plata con el donativo simbólico para el mantenimiento del culto en el templo; rey de armas y maceros; y la corporación dispuesta en forma de U, compuesta por los miembros del Gobierno de Navarra, presidentes de la Comunidad Foral y del Parlamento, y presidido por Don Felipe y Doña Letizia.
El cortejo ha recorrido la calzada exterior del recinto del Monasterio hasta la Puerta Speciosa mientras la Banda de Trompetas y Timbales interpreta la “Marcha para la Entrada del Reyno”. En el umbral de la puerta, el abad mitrado, Dom Juan Manuel Apesteguía, ha saludado a Don Felipe y Doña Letizia, ofreciéndoles agua bendita.
Una vez en el interior de la iglesia abacial, y tras ocupar su sitial junto al presbiterio, Don Felipe y Doña Letizia han seguido la celebración litúrgica, presidida por el Arzobispo de Pamplona y Obispo de Tudela, Francisco Pérez González, y concelebrada por el abad y los sacerdotes de la comunidad benedictina del monasterio.
En su homilía, el Arzobispo ha señalado que, "ante las situaciones que nos toca vivir, es conveniente que pongamos la mirada en la esperanza, con la que todo se supera". Y ha añadido que no sería auténtica esperanza si sólo se buscan los propios intereses, "ya que se necesita la solidaridad y la ayuda mutua -ha recalcado-, con las que se consiguen metas que parecen inalcanzables". Ha finalizado con el deseo de que "sepamos superar el sufrimiento" y ha invitado a ser "compasivos".
En el ofertorio, la Presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, ha entregado al abad la bandeja con la urna de plata (utilizada por las antiguas Cortes de Navarra para las votaciones) que contiene el donativo simbólico de las instituciones para el mantenimiento del culto en el Monasterio.
Al concluir la misa, Sus Altezas Reales, acompañados por la Presidenta Barcina y por el abad del monasterio, se han dirigido al sepulcro de los primeros Reyes de Navarra, cuyos restos se custodian en un arca neogótica de madera decorada con adornos metálicos, ante la que Don Felipe ha depositado una corona de flores rojas con la leyenda “Felipe y Letizia, Príncipes de Asturias y de Viana”.
El sepulcro alberga, al parecer, los restos de los primeros reyes del reino de Pamplona, precursor del reino de Navarra, entre los que figuran Iñigo Arista (primer rey de Pamplona, siglo IX), García I Iñíguez (siglo IX), Fortún Sánchez I (último rey de la dinastía Iñiga, siglo IX), Sancho I Garcés (siglo X), García Sánchez I (siglo X) y Sancho Garcés II Abarca (siglo X).
La parte musical de la ceremonia ha estado a cargo del Coro de Monjes del Monasterio y de la Coral Nora de Sangüesa, dirigida por Bruno Jiménez, que han interpretado las siguientes piezas: Entrada: Da pacem; Kyrie: Misa de Angelis; Aleluya: Aleluya (Pascual Aldave, 1924-2013); Ofertorio: Salve Regina (Emile Wambach, 1854-1924); Sanctus: Misa de Angelis; Agnus Dei: Misa de Angelis; Comunión: Sicut Cervus (G. L. de Palestrina, 1526-1594); Responso: Requiem aeternam dona eis domine et lux paerpetua luceat eis (canto gregoriano); Final: Himno de Navarra.