La Comisión de Cultura, Turismo y Relaciones Institucionales ha visitado hoy, a instancias de los no adscritos, la cantera de Alkerdi en Urdax, una explotación de 50 años cuyo aprovechamiento realiza Mármoles del Baztan, empresa que emplea a unas 40 personas, 20 de ellas modo indirecto.

Los miembros de la Comisión que han asistido han sido José Antonio Rapún, Begoña Sanzberro (G.P. UPN), Koldo Amezketa (G.P. Bildu), Juan Carlos Longás (G.P. Aralar-Nabai) y Patxi Leuza (no adscrito).

La delegación del Parlamento ha sido recibida en el Ayuntamiento de Urdax por Santiago Villares, alcalde de la localidad, Juan Ignacio Arzoz, teniente-alcalde, Juan José Suhas, segundo teniente-alcalde, Itziar Galarregi, concejal, Antonio Sarratea, empleado municipal, y Joaquín Salanueva, ingeniero de obras.

El objeto de la visita, según ha constatado Patxi Leuza a modo de preámbulo, ha sido “tomar nota de las distintas posturas en torno a la compatibilidad de la cantera con la protección del valor patrimonial, teniendo en cuenta que el Ayuntamiento cree que las condiciones de explotación se han vulnerado y en esa circunstancias el perjuicio económico y medioambiental resulta inasumible”.

A continuación, se ha celebrado una reunión en la que Santiago Villares ha repasado la situación generada a partir de la paralización provisional de los trabajos de perforación decretada por el Gobierno de Navarra, como consecuencia de la alarma provocada en el municipio por la voladura realizada en la cantera el pasado 15 de julio.

“La explosión del 15 de julio nos asustó y nos puso en guardia. La cantera tiene una autorización municipal para la extracción de mármol en determinadas condiciones. Data de 2003 y sigue en pie, siempre que el arrancamiento se ciña al método tradicional, por corte. No por voladura, porque eso supone una modificación sustancial que requeriría la apertura de un nuevo expediente de explotación, opinión que no comparte el Departamento de Industria”.

Al hilo de lo apuntado, el alcalde de Urdax ha censurado la falta de interlocución con la empresa, que se ha dirigido directamente al Gobierno, y ha rechazado la posibilidad cualquier nuevo proyecto que admita las voladuras como método principal de extracción.

Desde el Consistorio consideran que en esas condiciones resulta “imposible garantizar la preservación del patrimonio arqueológico” de la zona, entre el que destacan las cuevas de Berroberria y Alkerdi, declaradas Bien de Interés Cultural (BIC). “El perjuicio para nuestro modo de vida, basado en el comercio y el turismo, es notorio. La directora de Cultura nos dijo que van a mirar todo con lupa, pero la incertidumbre continúa”.

Concluido el encuentro, los Parlamentarios se han dirigido a la cantera, donde les aguardaban Pedro Pablo Gaztelupe y Juan José Moraga, gerente e ingeniero de la empresa Mármoles Baztan, respectivamente, junto a quienes han accedido al aprovechamiento.

Juan José Moraga ha comenzado apuntando que en la cantera de Alkerdi “siempre se ha empleado dinamita para limpiar la cobertura y llegar al mármol. Es más, si no existiera esa posibilidad la cantera resultaría inviable. Tengamos en cuenta que de 35 metros hacia abajo el terreno está lleno de cavidades, así que si de lo que se trata es de proteger también todas esas cuevas, habría que cesar la actividad”.

Moraga ha mostrado también su “sorpresa” por la repercusión originada por la explosión del 15 de julio,  ya que, “por distancia, es la que menos afección podía tener sobre los bienes protegibles. Las voladuras de 2012 y 2013, hasta cuatro, no generaron quejas y sin embargo fueron las más cercanas y a la misma altura de las cuevas”.

El ingeniero de la empresa ha dado cuenta del informe que, a instancias del Gobierno de Navarra, ha realizado la Universidad de Cantabria, donde se constata que la actividad de la cantera de Alkerdi “no supone ningún riesgo para la conservación del patrimonio, siempre y cuando se respetan las distancias y las cargas resultantes del estudio. Y así es, porque se apunta un tope de 27 kg de dinamita a 100 metros de distancia de la cueva y la carga que empleamos es menor”.

Así las cosas y tras aludir también a los informes de Príncipe de Viana, donde se acredita que las cuevas catalogadas como BIC “no han sufrido daño alguno”, Pedro Pablo Gaztelupe ha dado por probada la “compatibilidad” de la cantera con la conservación del patrimonio cultural del entorno y ha advertido que de no reanudarse la actividad de inmediato “las consecuencias pueden ser irreversibles”.

Terminada la exposición in situ por parte de la empresa, los portavoces parlamentarios de UPN, Bildu, Aralar-Nabai y no adscritos han agradecido las explicaciones de distinto signo facilitadas desde el Ayuntamiento y la empresa y se ha dado por acabada la visita.