El Pleno del Parlamento de Navarra ha rechazado hoy, con los votos en contra PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e Izquierda-Ezkerra, la enmienda a la totalidad presentada por Navarra Suma al Proyecto de Ley Foral de Presupuestos Generales de Navarra para el ejercicio 2023.

Ahora, una vez rechazada la devolución del citado proyecto de Ley al Gobierno, entre los días 12 y 16 de diciembre se procederá al examen de las enmiendas parciales (el plazo de presentación expira el día 22 a las 14:00) en la Comisión de Economía y Hacienda, cuyo dictamen será elevado a Pleno, para el definitivo debate y votación, el 22 de diciembre.

El Proyecto de Ley Foral de Presupuestos Generales de Navarra para el ejercicio 2023, cifrado en 5.748.951.173 euros, fue admitido a trámite el 4 de noviembre y publicado en el Boletín Oficial del Parlamento el día 7.

De los 5.748.951.173 euros que se contemplan en las Cuentas 5.238.730.313 corresponden al gasto no financiero (departamentos del Gobierno de Navarra, Parlamento de Navarra y Consejo de Navarra) y el resto, 510.220.860 euros, al gasto financiero (amortización de deuda y pago de intereses).

El techo de gasto no financiero supone un incremento del 9,28% respecto al Presupuesto de 2022, que ascendía a 4.767.034.210 millones de euros, lo que arroja una diferencia en términos absolutos de 471 millones de euros, 249 de los cuales proceden de los fondos europeos.

El G.P. Navarra Suma justifica la enmienda a la totalidad en su disconformidad con unos Presupuestos que suponen una clara salida en falso a nivel económico y fiscal, ya que, además de apoyarse en un “marco tributario gravoso” y en unas previsiones “irreales”, también en lo tocante a la “capacidad para abordar las reformas estructurales ya en marcha”, resultan inapropiados en el campo de las grandes infraestructuras, la creación de empleo y el equilibrio presupuestario, apartado este en el que se contrapone la “continua elevación del gasto” con las exigencias de las reglas fiscales de la UE, “que en algún momento volverán a entrar en vigor”.

En ese contexto y tras subrayar las “incertidumbres” derivadas de la convergencia de una serie de factores asociados a las “tensiones geoestratégicas con epicentro en Ucrania”, Navarra Suma insiste en la “falta de prudencia” que desprende el proyecto de Cuentas y advierte sobre la necesidad de examinar “cómo y en qué se gasta” antes de caer en la tentación de equiparar “mayor gasto” con “buenos presupuestos”, más aún si se tienen en cuenta las prospecciones del BCE, que apuntan hacia un contexto macroeconómico de “creciente complejidad”, incluida la “probable entrada en recesión de la zona euro”.

Así, después de recalcar que las previsiones de crecimiento se sitúan al menos un punto por debajo del 1,4% proyectado por el Gobierno en agosto, Navarra Suma repasa las carencias detectadas en ámbitos capitales como el tributario, el social y el de las grandes infraestructuras.

En relación al primero, se censura la ausencia de una reforma fiscal dirigida a desmontar la inflación para, procurando la estabilización de los precios, mitigar su impacto sobre hogares y empresas, aunque ello suponga una” ralentización de la actividad económica”, tal y como propugnan los principales bancos centrales del mundo, a través de “sucesivos y agresivos incrementos de los tipos de interés”.

En el orden social, se destaca el incremento de la bolsa de personas (95.000 más) en riesgo de pobreza y exclusión social, se desacredita la viabilidad del actual modelo de renta de inclusión, que “cronifica la dependencia”, y se tachan de “fracaso” las políticas de dinamización del mercado de trabajo, pues “Navarra ha pasado de ser la Comunidad con menor tasa de paro a ocupar la sexta posición”.

A todo ello se añade el “descontento generalizado” debido al funcionamiento de la sanidad pública, atrapada en una maraña de “listas y tiempos récord de espera” pese al incremento de recursos presupuestarios, y la ineficacia del modelo de financiación local, pues deriva en “pérdida de ingresos a 71 municipios y a todos los concejos, lo cual podría provocar un agravamiento del problema de la despoblación”.

En lo relativo a las grandes infraestructuras, concretadas en el Tren de Alta Velocidad y en la segunda fase del Canal de Navarra, Navarra Suma apoya la petición de devolución del proyecto de PGN para 2023 en la “ralentización” que se percibe en torno a dos inversiones “estratégicas para procurar un mayor bienestar de futuro”.

Navarra Suma concluye poniendo el acento en el carácter “electoralista” de unos Presupuestos Generales que “descuidan el largo plazo y sacrifican la gestión eficiente en busca de réditos políticos acordes a las exigencias de los partidos que sostienen el Ejecutivo Foral”.

PSN, Geroa Bai, Podemos-Ahal Dugu e Izquierda-Ezkerra han amparado su oposición a la enmienda a la totalidad en las prioridades de un proyecto “expansivo” cuyo objetivo fundamental pasa por “proteger a la ciudadanía, especialmente a los colectivos más vulnerables, así como al tejido productivo. La prioridad es el gasto social ".

A decir de los grupos que sostienen al Ejecutivo Foral, la enmienda a la totalidad formulada por Navarra Suma únicamente pretende “trasladar la imagen de una Navarra irreal y falaz que no existe. Navarra + ha hecho dejación de funciones, se ha preocupado más de escenificar un veto que de atender las necesidades de Navarra, todo por egoísmo político. Plantean trampa sobre trampa, quieren castigar a la sociedad navarra. No han arrimado el hombro, pero son los Presupuestos que Navarra requiere en un momento tan excepcional”.

En la misma línea, EH Bildu ha refutado los argumentos de Navarra Suma y ha mostrado su permisividad para con unas Cuentas Generales que, “si bien no son las que hubiéramos hecho, pues se quedan cortas porque carecen de ambición, denotan sensibilidad social. Dentro del margen que hemos tenido, hemos mejorado los servicios públicos y los derechos de personas y colectivos. Aunque no hemos logrado mover al Gobierno de sus tibias posiciones tributarias -coinciden con I-E, que ha demandado una "profunda reforma" del Impuesto de Sociedades-, hemos priorizado la necesidad de que Navarra cuente con Presupuestos”.

La Consejera de Economía y Hacienda, Elma Saiz, ha rebatido el planteamiento de Navarra Suma defendiendo la “prudencia y el rigor” de las previsiones con las que trabaja el Gobierno de Navarra, que baraja un crecimiento del PIB en 2023 del 1,4%

“Presentamos unos Presupuestos expansivos, acordes a la responsabilidad de un Gobierno centrado en dar estabilidad económica y social a una Comunidad que lo necesita. La izquierda también sabe gestionar la economía con responsabilidad, sucede que nuestras prioridades son diferentes”.

• www.parlamento-navarra.es
• Publicación del proyecto de Ley Foral (BOPN, n.º 125, de 07-11-2020)
• Publicación de la enmienda (BOPN, n.º 130, de 14-11-2022)