El Pleno del Parlamento ha aprobado hoy por unanimidad una resolución por la que se insta al Gobierno de Navarra a que “lleve a cabo una evaluación continua, mediante encuestas de satisfacción, en relación con la calidad de la comida que se sirve en los centros sanitarios del SNS-O y que forma parte esencial en el proceso de recuperación de los enfermos”.

Dichas encuestas, que “podrán recoger también la opinión sobre otros aspectos de la estancia hospitalaria y asegurarán en todo momento la confidencialidad, se entregarán a los pacientes a su ingreso con el resto de la documentación y utensilios”.

Además, “el personal sanitario se encargará de informar de la finalidad de las mismas, de la posibilidad de realizarlas durante el ingreso y de recordar antes del alta la importancia de responder para corregir posibles errores y mejorar la calidad del servicio percibida por el usario”.

La resolución incluye otros dos apartados, agregados a partir de una enmienda de adición presentada por Bildu y Aralar-Nabai y aceptada por Socialistas de Navarra, titular de la iniciativa. En el primero de ellos, se emplaza al Ejecutivo Foral a que “apremie a la empresa Mediterránea de Catering a cumplir con el compromiso que expresó en el concurso de adjudicación y realice también encuestas de satisfacción al menos cada 6 meses”.

Y, por otro lado, se exhorta al Gobierno de Navarra a que “elabore a partir de junio de 2014, con carácter trimestral, encuestas a dietistas, tanto dependientes de Mediterránea de Catering como del SNS-O, así como a facultativos del SNS-O relacionados con la alimentación de los pacientes”.

Estos dos últimos apartados han prosperado con los votos a favor de SN, Aralar-Nabai, Bildu, I-E y los no adscritos y los votos en contra de UPN y PPN.

En la exposición de motivos, la resolución impulsada por el G.P. Socialistas de Navarra aparca, por “estéril”, el debate “ideológico” abierto en torno a la “privatización” del servicio de cocinas del CHN y el coste laboral que, en forma de “pérdida de puestos de trabajo y empeoramiento de las condiciones laborales”, ha dado pie a diversas argumentaciones en torno a la “eficiencia económica” del nuevo modelo, y se apuesta por habilitar un “instrumento útil que permita cotejar de forma periódica la calidad de la comida” que se sirve.

El grupo proponente entiende que es importante contar con “indicadores claros y ciertos” para, dado el caso, “incorporar cambios” tendentes a la “mejora paulatina de la calidad de la comida”, ya que se trata de un aspecto “crucial” que podría “deteriorar la imagen del conjunto del sistema de salud de la Comunidad Foral”.

A ese respecto, se alude a las “denuncias” formuladas por algunas dietistas en relación a “fallos de coordinación en la confección de las dietas y a la falta de calidad de algunos productos utilizados en su elaboración, extremos desmentidos en su momento por el Departamento de Salud”.

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• Publicación de la moción (BOPN, n.º 49, de 04-04-2014)