Coincidiendo con el Día Mundial de las Personas Refugiadas, el Parlamento de Navarra ha acogido hoy la mesa de diálogo ‘La crisis de los refugiados, en el ángulo muerto’ organizada por la organización Médicos Sin Fronteras. En ella han participado Igor García Barbero, miembro de la Unidad de Emergencias de Médicos Sin Fronteras; Manuel Martorell, periodista navarro especializado en Oriente Medio y el pueblo kurdo, y Javier Galparsoro, presidente de CEAR-Euskadi. Nagore Eskisabel, delegada de Médicos Sin Fronteras en Navarra ha sido la moderadora de la mesa de diálogo.

La Presidenta del Parlamento de Navarra, Ainhoa Aznárez Igarza, ha sido la encargada de abrir la mesa de diálogo, agradeciendo a las ONGD “que le pongan voz a esta drama”. Ha puesto en valor la propuesta que Médicos Sin Fronteras ha traído durante este mes en su exposición “De la acción a la palabra”, expuesta en el Atrio del Parlamento.

“Welcome refugees, esto nos gustaría decir no sólo en momentos puntuales como el que hemos vivido la semana pasada con el Acuarius, sino todos los días con las personas que tienen que abandonar sus hogares, su tierra, sus espacios de confort perseguidas por las cientos de razones que les acucian”, ha explicado Aznárez, subrayando que “ahora toca escuchar, pero toca más aún actuar porque las vidas de las personas migrantes, porque las vidas de las personas refugiadas sí importan, sí nos importan”.

Nagore Eskisabel, delegada de Médicos Sin Fronteras en Navarra ha agradecido al Parlamento de Navarra la oportunidad de celebrar esta mesa de diálogo y de exponer la exposición ‘De la acción a la palabra’ en el Atrio de la sede. Eskisabel ha explicado que en la última década el número de personas refugiadas se ha triplicado, pasando de 33 millones a 68,5 millones, y ha llamado a la participación, ya que “la crisis de las personas refugiadas solamente acapara nuestra atención cuando hay acontecimientos puntuales”.

Javier Galparsoro, abogado y presidente de CEAR-Euskadi, ha expuesto que “el asilo se ve como un acto de caridad, de generosidad”, y ha recordado que la Convención de Ginebra del año 1951 determina el estatus de refugiado, de la misma manera que “el Código Civil español recoge la obligación del deber de socorro”. Galparsoro afirma que es muy difícil encontrar la solución a este problema, pero “como mínimo debemos ponernos en la piel de las personas refugiadas, ya que tienen que elegir entre un ataúd y una maleta”.

Igor García Barbero, periodista, miembro de la Unidad de Emergencias de MSF y experto en el éxodo rohingya, ha expuesto su experiencia en países como Bangladesh, contando diferentes historias de personas que han vivido esta situación, y ha subrayado que “la perspectiva tiene que centrarse en las personas, no en los número, ya que detrás de estos, del número de 68,5 millones de personas refugiadas, hay 68,5 millones de historias, de personas con nombre y apellido”. García ha querido destacar que solamente una pequeña parte de personas refugiadas están en Europa o en países desarrollados, mientras “la mayoría se encuentra en países en vías de desarrollo, países que tienen sus propios conflictos y desafíos, y que están haciendo un esfuerzo enorme para acoger a toda esta gente. Bangladesh, por ejemplo, acogió en pocas semanas a 700.000 personas”.

Manuel Martorell, periodista navarro especializado en Oriente Medio y el pueblo kurdo, ha puesto el foco en el origen del problema, ya que “garantizar una acogida adecuada” es solamente la consecuencia del problema. Además, ha hablado de la política de los estados, de los regímenes hoy en día es “que no haya testigos, se escudan en la excusa de la seguridad para reconducir los canales de información”.

Tras las intervenciones de los ponentes, ha sido el turno del público, y se ha desarrollado un diálogo entre los asistentes y los ponentes. Entre los asistentes, se encontraban los parlamentarios Rafael Eraso (Geroa Bai), Asun Fernández de Garaialde (EH Bildu), Mónica Doménech (UPN), Tere Sáez (Podemos-Ahal Dugu) y Ainhoa Unzu (PSN).

La sesión se enmarca en la iniciativa Parlamento Abierto, un programa ideado para dar cauce a la discusión de iniciativas ciudadanas de interés social.