El Consejero y Vicepresidente Javier Remírez ha afirmado que la Estrategia de Juventud 2020-2023 se alineará con el Plan Reactivar Navarra y con la Agenda 2030, y ha anunciado que ya está preparada la convocatoria de ayudas a entidades locales en este ámbito, dotada con 320.000 euros.

En respuesta a una interpelación del PSN en el Pleno, Remírez ha abogado por poner cada día en valor la política de juventud, una política transversal, participativa y coordinada entre los distintos departamentos, para que esté en el centro durante toda la legislatura.

El Vicepresidente Primero ha añadido que los jóvenes son clave para escribir el presente y el futuro de una sociedad justa y cohesionada. En ese marco, ha reconocido que para contar con sus capacidades hay que atender primero sus demandas, de cara a acompañarles en las necesidades que encuentran.

Para hacer frente a problemas estructurales que, como el empleo o la emancipación, se han visto agudizados por el COVID-19, Remírez ha defendido la necesidad de marcar estrategias capaces de hacer viables los proyectos vitales de la juventud, lo cual, entre otros, pasa también por ofrecer una formación adecuada.

Aspectos estos y otros muchos que se contemplarán en la Estrategia de Juventud hasta 2023, que se elaborará una vez que el Instituto termine el diagnóstico y que, según ha revelado, tendrá tres ejes: el social, el de la emancipación, para lo que se ampliará el Plan Emancipa de vivienda, y el de la salud, la creatividad o el deporte.

"Debemos seguir trabajando por potenciar las capacidades de nuestros jóvenes y para ello debemos atender sus requerimientos con medidas concretas que supongan un impulso y con políticas estructurales que faciliten estrategias sólidas y sirvan de guía y soporte".

Remírez respondía así a una interpelación de Carlos Mena (G.P. PSN), quien ha indicado que se debe hablar de las necesidades de la juventud y de sus retos, los cuales requieren de políticas transversales y atención a las nuevas realidades, todo ello para que los jóvenes no vuelvan a ser ahora, como sucediera en 2008, los grandes perjudicados.

Economía Social, con empleo juvenil de calidad; derechos sociales y bienestar, para no abandonar a nadie; y laeducación adaptada a la situación que vivimos, sin recortes y con políticas que fomenten la innovación y la ciencia, son los ejes prioritarios para el PSN.

Y a ellos Mena ha sumado la educación no formal, la igualdad, el respeto al diferente, la internacionalización, el asociacionismo y la sostenibilidad como aspectos fundamentales a tener en cuenta.

"La juventud está cansada de repetir que no son el futuro, que también son el presente”, y por eso ha pedido que “se dote a todos los departamentos del Gobierno de la perspectiva de políticas públicas para este colectivo", para el que, además, ha reclamado "una actitud de escucha activa".

Ángel Ansa (G.P. Navarra Suma) ha interpretado lo dicho por ambos como un conjunto de "buenas palabras", ya que "ni a nivel presupuestario ni de acción política se observan cambios".

En ese sentido, ha subrayado que un 27,64% de los jóvenes están en paro, pero ninguno de los planes anunciados para esta legislatura en ese ámbito se ha elaborado aún. Del mismo modo, se ha interesado por iniciativas y decisiones en torno al tiempo libre o la política de becas.

Jabi Arakama (G.P. Geroa Bai), que ha subrayado la importancia de contar con un diagnóstico, ha valorado lo realizado desde 2015 hasta hoy, porque la juventud necesita "propuestas en positivo", como la renta garantizada contra la pobreza y la exclusión, las ayudas a la vivienda para la emancipación, o un empleo de calidad que, sin embargo, "el paraguas legal imposibilita".

Maiorga Ramírez (G.P. EH Bildu) ha sostenido que la juventud tiene ideas y capacidad para decidir, por lo que desde la política lo que hay que hacer es "canalizar". Por ello, ha cuestionado el soporte para su participación, "muy débil" todavía, y ha puesto en duda el nivel de bienestar que tendrán los jóvenes con la precariedad inherente a la reforma laboral en vigor.

Ainhoa Aznárez (A.P.F. Podemos-Ahal Dugu) ha recordado que, antes de la crisis sanitaria, la juventud ya era un colectivo altamente vulnerable en materia socioeconómica . Ahora se dice que será "la más perjudicada", con una dualidad formativa y unas expectativas de proyecto vital "frustradas", por lo que ha instado a dar respuestas, a afianzar un modelo "más corresponsable y participativo".

Marisa de Simón (G-Mixto Izquierda-Ezkerra) ha comentado que la juventud "tiene tiempo, posibilidades y la responsabilidad de construir el futuro". Una juventud que, "aun con formación y perores salarios, es también presente, sujeto de derechos y deberes". Es, por tanto, "una cuestión de igualdad de oportunidades, eso es lo que hay que ofrecer”.