El Presidente del Parlamento, Alberto Catalán, ha inaugurado hoy la exposición que, con el objetivo de sensibilizar sobre la importancia de contribuir a la lucha por sobrevivir y superar la condición de pobreza, conforman una serie de fotografías reunidas por la Fundación Juan Bonal bajo el enunciado ’10 años...un millón de sonrisas’.
 

El acto ha tenido lugar en el Atrio de la sede de la Cámara y ha contado con la asistencia de los miembros de la Mesa Samuel Caro, Txentxo Jiménez, Maite Esporrín y Koldo Amezketa, así como de Raquél Mayayo, directora de la Fundación Juan Bonal, y representantes de los diversos grupos parlamentarios.
 

En el transcurso de su intervención, Alberto Catalán ha explicado que la organización de esta muestra responde al interés por recordar la necesidad de encontrar una solución “definitiva” a la difícil situación en la que, tal y como pregona la ONU, se encuentran millones de personas de todo el mundo, sujetos a un sin fin de “injusticias y desigualdades”.
 

Seguidamente, el Presidente ha subrayado el carácter ilustrativo de una muestra que trata de explicitar los “los males que “acechan a la Humanidad” y el ejemplo de “solidaridad, servicio y esperanza que, de cara a construir un mundo más justo y equitativo, representa el trabajo de tantos cooperantes y misioneros”.

En ese contexto, Catalán ha destacado el papel de los activistas de la Fundación Juan Bonal a la hora de “facilitar el acceso a elementos tan básicos como el agua, un bien del que se hayan privados 884 millones de personas y que representa la segunda causa de muerte infantil en los países en vías de desarrollo”.

De este y otros problemas, como la explotación infantil, la desnutrición o las desigualdades, se ha hecho eco el Presidente, que no ha obviado la “negligencia de los gobiernos de muchos países que, aun contando con recursos naturales, no son capaces de acabar con las desigualdades sociales”.

En ese sentido, Catalán ha afirmado que el Parlamento “hace suyos los objetivos de la Fundación Juan Bonal”, ha reiterado su “compromiso con la protección de los sectores de población más vulnerables” y ha llamado a hacer uso de todos los cauces establecidos para “avanzar en la expansión de los Derechos Fundamentales”.

A modo de colofón y tras subrayar la importancia de la educación y la sanidad como “elementos básicos de desarrollo en cualquier parte del mundo”, el Presidente ha reconocido el “ejemplo de humanidad y entrega de las hermanas misioneras de la Caridad de Santa Ana” y se ha dirigido a la sociedad para, “a pesar de la crisis”, instar a “colaborar en la construcción de un mundo más solidario”.

Raquél Mayayo, por su parte, ha agradecido la implicación del Legislativo Foral y sus reiterados pronunciamientos a favor de los derechos de las mujeres y la infancia, y ha resumido la labor de la Fundación en “ayudar a la gente a convertirse en agente de su propio desarrollo”.

“Estamos presentes en 30 países del mundo entero, más de 20.000 niños han pasado ya por nuestras escuelas. La esperanza está ahí, en los planes de formación y capacitación profesional, en los programas de sostenimiento de centros nutricionales y, en definitiva, en la sensibilidad con los más débiles, el mejor ejemplo de solidaridad y compromiso”.

La Fundación Juan Bonal es una ONG creada por las Hermanas de la Caridad de Santa Ana. En sus más de 200 centros repartidos por los 5 continentes atienden a los colectivos más desfavorecidos de cada país, principalmente en las áreas de enseñanza, salud, atención de la mujer, tercera edad y proyectos de desarrollo.

La exposición ’10 años...un millón de sonrisas’, una retrospectiva con la que se pretende condensar la labor desarrollada por la Fundación Juan Bonal en la última década, permanecerá abierta al público en el Atrio de la sede de la Cámara hasta el 5 de mayo, en horario de 10 a 20 horas, de lunes a viernes.