La Comisión de Cultura y Turismo y Relaciones Institucionales ha visitado hoy, a petición del G.P. Bildu, la Casa de Cultura de Lesaka, una dotación inaugurada a finales de diciembre después de una década de gestiones municipales.

Los miembros de la Comisión que han asistido han sido Ramón Casado, Carmen González, Begoña Sanzberro (G.P. UPN), María Victoria Arraiza (G.P. Socialistas de Navarra), Miren Aranoa (G.P. Bildu) y Nekane Pérez (G.P. Aralar-Nabai).

La delegación del Parlamento ha sido recibida por Belén Mutuberria, técnica de Cultura, José Emilio del Río, Xabi Txoperena, José Luis Etxegaray, Ainara Flores y Maider Arrieta, concejales de Lesaka, y Pedro Burguera, arquitecto.

El objeto de la visita, según ha explicado Miren Aranoa, ha sido “conocer in situ la situación y las necesidades de la Casa de Cultura de Lesaka, recientemente inaugurada y con el equipamiento del espacio destinado a biblioteca todavía sin completar”.

Seguidamente, los Parlamentarios han realizado un recorrido guiado por las distintas dependencias del complejo cultural Harrionda, una dotación diferenciada en dos bloques, el templo del antiguo convento y un segundo edificio anexo de nueva construcción. Las dotaciones destinadas a la promoción cultural incluyen un auditorio, bautizado con el epígrafe Txokobiko, y varias aulas.

A continuación, se ha celebrado una reunión en el transcurso de la cual José Emilio del Río, concejal de Economía, ha glosado el dificultoso itinerario administrativo y los problemas de financiación que, entre otros, redujeron la inversión inicial de 4,8 millones a 3,6, incluidos los 2,5 comprometidos por el Estado. En el presupuesto final se incluyen el sistema de biomasa para calefacción de este y otros edificios, además del equipamiento del escenario.

Después de conocer las instalaciones de la actual biblioteca en la planta alta del edificio del Ayuntamiento, los portavoces de UPN, SN, Bildu y Aralar-Nabai han coincidido en afirmar que son muy acogedoras, pero no cumplen unos requisitos mínimos de accesibilidad ni de seguridad ante una posible evacuación. El nuevo espacio, por contra, es más funcional, garantiza la accesibilidad y la conexión a internet de los usuarios y facilita también la conexión de esta biblioteca a los recursos de otras bibliotecas.

Los representantes municipales han solicitado, a su vez, ayuda para terminar de recuperar el antiguo convento, ya que, aunque se han hecho las obras para evitar mayores deterioros, no se ha podido avanzar lo suficiente como para poder utilizar los espacios correspondientes al templo del convento.

El encuentro ha concluido con el compromiso de Bildu y Aralar-Nabai de presentar una moción demandando los medios necesarios (unos 60.000 euros) para trasladar y poner en marchar la biblioteca en el nuevo espacio.