El Pleno del Parlamento de Navarra ha aprobado hoy una Resolución por la que "se insta al Gobierno del Estado y a su Ministerio de Industria a no prorrogar la vida de la central nuclear de Garoña".

Este párrafo de la Resolución ha sido aprobado por los Grupos Parlamentarios UPN, SN, NaBai, Bildu-Nafarroa e I-E; en contra ha votado el Grupo Parlamentario PP.

La Resolución insta asimismo al Gobierno de Navarra "a realizar una apuesta clara por la priorización del ahorro energético mediante la reducción del consumo, el uso de fuentes renovables ecológicas y una política de apoyo al desarrollo de las energías renovables en todas sus formas, de manera que se favorezca un cambio en el sistema energético actual hacia otro más sostenible y solidario”.

Este segundo párrafo de la resolución, que ha sido modificado por una enmienda de los Grupos UPN y SN, ha sido aprobado por unanimidad.

En la exposición de motivos de la moción presentada por los Parlamentarios del Grupos Bildu-Nafarroa Maiorga Ramírez Erro y Bakartxo Ruiz Jaso, se justificaba la propuesta en estos términos: “La central nuclear de Garoña es desde el año 2006 la más vieja del Estado español. Entró en actividad el 2 de marzo de 1971 y fue diseñada para una vida útil de cuarenta años, plazo que expiró en marzo del pasado año.
Los sucesivos fallos a lo largo de su actividad demuestran que la central sufre serios problemas de seguridad a lo que hay que sumar un problema de agrietamiento consecuencia de la corrosión.
La prolongación de su funcionamiento supone un riesgo inadmisible para el medio ambiente, la seguridad y salud públicas, poniendo en riesgo la vida de millones de personas que residen en el entorno de afección en caso de accidente. Consciente de este riesgo, la sociedad de Euskal Herria, de Araba y de Vitoria-Gasteiz, ha reclamado de manera reiterada y masiva en los últimos años el cierre inmediato de la central.
También desde las instituciones tanto el Gobierno autonómico como la Diputación de Araba y el Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz se han posicionado en numerosas ocasiones a lo largo de los últimos diez años en esta materia y han reclamado al Gobierno del Estado español la clausura de dicha central.
Está demostrado que la prolongación de la licencia de explotación de la central nuclear de Garoña no es justificable, ya que su aportación energética está sobradamente cubierta por sistemas de generación renovable.
A pesar de todo esto, en los últimos años los diferentes Gobiernos del Estado español se empeñan en prorrogar la vida de la central poniendo en riesgo el medioambiente y la salud de millones de ciudadanos y ciudadanas. Una decisión que solo puede responder a la connivencia por parte del Gobierno del Estado español con los intereses lucrativos de las compañías eléctricas propietarias.
Es urgente y necesario ecologizar la economía. Hacer del nuestro un territorio sostenible precisa no ponerlo en situaciones de riesgo extremo, como la pervivencia de la actividad de Garoña supone, y hacer una apuesta clara, inequívoca e inaplazable por las fuentes de energía renovables y ecológicas junto a un replanteamiento del nivel de consumo energético actual.”.

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Publicación moción (BOPN nº 70, 7 de septiembre de 2012)