El consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos del Gobierno de Navarra, José María Aierdi, ha afirmado que van a seguir "ampliando" el parque público de vivienda para contar al final de esta legislatura "con al menos 1.000 nuevas viviendas" y también se ha propuesto que durante estos cuatro años se superen las 28.000 viviendas rehabilitadas.

En respuesta a una interpelación de Podemos-Ahal Dugu en el Pleno de Control, Aierdi ha manifestado que garantizar el derecho a una vivienda es "un reto de primer orden" que "exige esfuerzos públicos y privados" y que nos va a exigir buscar el mayor consenso dentro de esta Cámara".

Ha remarcado el consejero que el derecho a la vivienda será el "leitmotiv' a través de "políticas reales de incremento de alquiler" y ha garantizado que desarrollarán "una política para todas las personas y para todo el territorio".

En este sentido, ha avanzado que seguirán ampliando el parque de vivienda público, pero también ha considerado que "una situación de emergencia justifica una intervención temporal en el mercado del alquiler privado".

Por ello, se plantea para 2020 la creación del índice de sostenibilidad de los alquileres para que "dentro de este año contemos con una referencia que nos traslade una transparencia absoluta de la situación del sector". De este modo, ha expuesto Aierdi, a finales del año, a través de la política fiscal, se pueden "incorporar medidas que incidan en el alquiler de la comunidad".

Aierdi ha destacado, además, que "estamos realizando ya el censo de grandes tenedores de vivienda y de viviendas deshabitadas" y ha asegurado que "dentro de los cuatro primeros meses de este año vamos a tener operativo el censo de grandes tenedores". Respecto al de viviendas deshabitadas, ha comentado que también "vamos a tener la respuesta de las cuatro zonas que se ha iniciado el trabajo, un elemento fundamental para incorporar recursos al parque de vivienda disponible".

Asimismo, Aierdi ha afirmado que desde el Ejecutivo foral van a seguir trabajando en la rehabilitación y ha señalado que "nos gustaría poder terminar la legislatura con un número importante de viviendas rehabilitadas. El objetivo debería ser superar las 28.000 viviendas y movilizar alrededor de 100 millones de euros anuales en esa política", ha planteado.

Según ha expuesto el consejero, "no solamente basta con este tipo de medidas", sino que también son necesarias modificaciones de normativa y, en este sentido, ha explicado que se está revisando el decreto foral de habitabilidad. "En las próximas semanas podremos iniciar el proceso de participación para intentar el máximo consenso posible. Todo el mundo coincide en que es necesario revisar el decreto, vamos a ver si coincidimos en el contenido", ha agregado.

Ha apostado, además, por "revisar el decreto para posibilitar el desarrollo de vivienda protegida dentro del casco urbano" y también ha planteado "revisar la ley para promocionar un mayor número de vivienda protegida".

"Vamos a modificar la calificación provisional convirtiéndola en indefinida de las viviendas de protección. Los recursos públicos no pueden servir para especular, sino que debe dar respuesta a la demanda ciudadana", ha manifestado Aierdi, quien ha explicado que también se revisarán aspectos relacionados con el porcentaje de reserva de vivienda protegida.

Por su parte, Mikel Buil (Podemos-Ahal Dugu) ha considerado que "la vivienda pública es una gota en el mar, no va a tener la incidencia necesaria para bajar el precio del alquiler". Por ello, ha considerado importante "sacar el índice de sostenibilidad de alquileres" y el censo de vivienda vacía, "movilizando a través de sanciones a quien deje la vivienda vacía".

En esta línea, ha instado al consejero a trabajar para "pinchar la burbuja del alquiler en el mercado libre", ya que, a su juicio, "será una de las cosas más transcendentes que podamos hacer en esta legislatura".