El Presidente del Parlamento de Navarra, Unai Hualde, ha recibido hoy en la sede de la Cámara a una representación del Foro Social Permanente en Navarra integrada por Fernando Armendáriz, Terexa Fagoaga y Tasio Arrizabalaga.

En el transcurso del encuentro, celebrado en la Sala Julia Álvarez, los representantes del Foro han entregado al Presidente las conclusiones de las últimas Jornadas sobre Convivencia democrática en Navarra, uno de cuyos actos –un diálogo cruzado entre víctimas de diferentes violencias- tuvo lugar el pasado 8 de octubre en el Salón de Plenos.

A ese respecto, Fernando Armendáriz ha destacado el “consenso existente en torno a la necesidad de construir un carril central que fortalezca la convivencia democrática”. A su entender, “eso pasa por un reconocimiento igualitario de todas las víctimas, la desactivación de la actual política penitenciaria y la construcción de una memoria crítica e inclusiva que no deje de lado ningún actor, ningún relato y ninguna opinión. Nuestras aportaciones al Plan Estratégico de Convivencia van en esa dirección”.

En opinión del Foro Social Permanente, el “consenso político, social y sindical acerca de la obligación de avanzar hacia un futuro en el que el diálogo constituya el elemento central de debate y discusión es amplísimo y contrasta con la crispación política, un elemento de preocupación que, no obstante, no refleja el sentir ciudadano”.

Unai Hualde, por su parte, ha agradecido el trabajo del Foro “en torno a una cuestión tan sensible, pero a la vez necesaria para ayudar a construir una sociedad mejor. Dar testimonio a las víctimas de la violencia reciente que hemos padecido es fundamental para seguir avanzando”.

El Presidente, que seguidamente ha comparecido en rueda de prensa con los portavoces del Foro Social Permanente, ha reiterado el “compromiso del Parlamento a la hora de seguir colaborando en la realización de más jornadas como las que, desde 2016, se vienen celebrando en la Cámara”.

El Foro Social Permanente es una plataforma social dirigida a la “construcción de una convivencia democrática que, a partir de la generación de dinámicas de encuentro y reconocimiento entre diferentes víctimas, posibilite la elaboración de una memoria crítica inclusiva en sintonía con la mayoría social y política del país”.