La Comisión de Cultura, Deporte y Turismo visita la Biblioteca de Navarra
Además de ser el “refugio” del patrimonio bibliográfico y filmográfico de la Comunidad Foral, pretende ser un lugar de encuentro, estudio, lectura, consulta y actividad
La Comisión de Cultura, Deporte y Turismo ha visitado hoy la Biblioteca de Navarra, una dotación inaugurada en marzo de 2011 destinada a la conservación y difusión del patrimonio bibliográfico y filmográfico de Navarra, capaz de almacenar más de un millón de volúmenes y ofrecer amplios espacios de uso público.
Los miembros de la Comisión que han asistido han sido Javier Trigo, Félix Zapatero (UPN), Ibai Crespo (PSN), Mikel Zabaleta (EH Bildu), Itxaso Soto (Geroa Bai) y Daniel López (Contigo-Zurekin).
La delegación del Parlamento ha sido recibida por Asun Maestro, directora de Servicio de Bibliotecas, Anabel Olaso, jefa de Sección de Biblioteca de Navarra, Fernando Ross, jefe de Sección de la Red de Bibliotecas, Virginia Oyarzun, jefa del Negociado de Recursos de Información, Laura Irulegui, jefa del Negociado de Coordinación Bibliotecaria, Clara Flamarique, jefa del Negociado de Proyectos Bibliotecarios y Martín Saragüeta, jefe del Negociado de Servicios Digitales.
El objeto de la visita, según han explicado los portavoces de los grupos parlamentarios, ha sido “conocer la situación y las necesidades de la Biblioteca de Navarra, las actividades que realiza, así como el programa bibliotecas y semillas y otras acciones de divulgación, y la función de control de fondos bibliográficos”.
Seguidamente, Asun Maestro ha apuntado que la Biblioteca de Navarra, inaugurada en el año 2011, es un espacio “sostenible, rentable y útil, un lugar de encuentro, estudio, lectura, consulta y actividad”. Se trata, según ha añadido, del "refugio" del patrimonio bibliográfico y filmográfico de Navarra, responsable de su depósito legal, asumiendo las funciones de “órgano bibliográfico superior” de la Comunidad Foral.
La Biblioteca de Navarra es una biblioteca pública y, a su vez, una biblioteca patrimonial con la función de “recoger, conservar y difundir el patrimonio de Navarra”, por lo que, además de garantizar la respuesta a los desafíos de la demanda de servicios bibliotecarios de Navarra, es capaz de almacenar “más de un millón de volúmenes”. Hoy en día la colección consta de casi 500.000 ejemplares, de los que 136.000 están a disposición del público.
Maestro ha destacado la “capacidad de adaptación” de la Biblioteca de Navarra, que se va adecuando a las necesidades que van surgiendo, adaptando los diferentes espacios para diferentes usos. En ese sentido, ha anunciado que se está implantando un “ambicioso” plan de accesibilidad universal, física y digital, que “se irá poniendo en marcha poco a poco”.
Dicha adaptación, según añade Maestro, se ratifica en el "importante salto digital" que ha dado la Biblioteca de Navarra a partir de la pandemia de la Covid-19, no solo en lo que a la administración electrónica se refiere, sino a la apuesta por la creación de contenido digital, la creación de un diseño de imagen de marca, oferta de conferencias y charlas por streaming, etc.
Tras poner en valor la amplia oferta de actividades, talleres e iniciativas que surgen desde la Biblioteca de Navarra, Maestro se ha referido a la escasez de personal, que cuenta solamente con 21 personas en la plantilla. Destacan, en ese sentido, la necesidad de ampliar la plantilla, así como de “fortalecer la estructura del servicio de Bibliotecas”.
Seguidamente los miembros de la Comisión de Cultura, Deporte y Turismo han conocido el programa Bibliotecas y semillas, un experimento de agitación cultural, una iniciativa que tiene como objetivo “reunir, conservar y compartir semillas de variedades hortofrutícolas locales o de interés para su utilización y reproducción en los huertos”, y que, de la misma manera, busca “recoger y difundir todo el conocimiento asociado a ellas, con una selección de materiales de consulta y préstamo relacionados con la biodiversidad, la agricultura local y sostenible y la soberanía alimentaria”.
Esta iniciativa, según ha expuesto Clara Flamarique, persigue que los centros de lectura “crezcan como espacios de cultura, no sólo en su sentido tradicional de facilitar el acceso a la información, al conocimiento y a la investigación”, sino que, también y especialmente, lo hagan “en el primer y original significado de la palabra cultura como cultivo”. Se trata en definitiva “de cultivar y esparcir semillas y conocimiento para que ambos, las semillas y el conocimiento asociado a ellas, se conserven”.
A continuación, los Parlamentarios y Parlamentarias han realizado un recorrido guiado por las distintas dependencias de la Biblioteca, una dotación que costó en torno a 25 millones de euros y cuya apertura, una vez completado el equipamiento y traslado de los fondos, libros y documentos que se conservaban en la Biblioteca de San Francisco y demás ubicaciones, tuvo lugar el 1 de marzo de 2011.