Publicada el Martes, 23 de Diciembre de 2014

Rechazado el proyecto de Ley de Cuentas Generales de Navarra de 2013

Al igual que en 2012, los ingresos tributarios solo permitieron financiar el gasto corriente, con lo que apenas existe capacidad para afrontar inversiones

El Pleno del Parlamento ha rechazado hoy, con los votos en contra de Socialistas de Navarra, Bildu, Aralar-Nabai, Izquierda-Ezkerra y los no adscritos, la abstención del PPN y el voto a favor de UPN, el proyecto de Ley de Cuentas Generales de Navarra de 2013, que constituye una prórroga de los Presupuestos de 2012, los últimos aprobados.


Según el informe remitido en su día por la Cámara de Comptos, las Cuentas Generales de Navarra de 2013 ofrecen una visión general sobre la situación económico-financiera de la Administración Foral. En el informe se recogen las cuentas del Gobierno de Navarra y sus organismos autónomos, las sociedades y fundaciones públicas, el Parlamento y sus órganos dependientes: Cámara de Comptos y Defensor del Pueblo.


En lo referente al Gobierno de Navarra, la Cámara de Comptos señala que gastó el año pasado 3.700 millones e ingresó una cifra similar.


La financiación de esos gastos se realizó en un 85 por ciento con ingresos propios, un dos por ciento a través de transferencias y un 13 por ciento a través del endeudamiento.


En cuanto a los gastos más importantes, el 42 por ciento se destinó a transferencias, el 30 por ciento a personal, el 14 por ciento a bienes corrientes y servicios, el 8 por ciento al pago de la deuda y un 3 por ciento a inversiones. Respecto a 2012, destaca el aumento en tres puntos de la carga financiera.


Por lo que se refiere a los ingresos, los tributarios suman el 82 por ciento, el 13 por ciento se consiguió vía endeudamiento y el resto corresponde a ingresos patrimoniales y de transferencias.


Atendiendo a la función del gasto, la sanidad supone el 24 por ciento, la aportación al Estado el 16 por ciento, la Educación el 15 por ciento y las políticas sociales el 10 por ciento.


Respecto al ejercicio de 2012, los gastos aumentaron un 1,5 por ciento. Destacan en este sentido, los aumentos experimentados en los gastos por habitante para el pago de la deuda (50 por ciento) y la aportación al Estado (10 por ciento); los gastos en políticas sociales y sanidad, por el contrario, descienden en un 8 y 5 por ciento respectivamente.


Los ingresos aumentaron un 3 por ciento, aunque los tributarios disminuyeron ligeramente. Lo recaudado a través de tasas y precios públicos descendió un 10 por ciento y aumentaron en un 11 por ciento los ingresos vía deuda, como consecuencia de la captación de 463 millones de créditos.

Al igual que ocurrió en 2012, el año pasado los ingresos tributarios solo permitieron financiar el gasto corriente. Eso supone, teniendo en cuenta el volumen de deuda existente, que apenas existe capacidad de afrontar inversiones.


El saldo presupuestario de la Hacienda Foral, sin contar la captación de deuda, es negativo en 218 millones, aunque mejora en casi 100 millones respecto a la cifra de 2012.


El Gobierno de Navarra tenía a finales de 2013 una deuda financiera de 2.487 millones. Si atendiendo a los criterios de la contabilidad nacional se le suman el endeudamiento imputado a la Autovía del Pirineo, el de la zona regable del Canal de Navarra y el de las empresas y fundaciones públicas, la deuda total suma 3.133 millones, es decir, 4.900 euros por habitante.


El porcentaje de deuda sobre el PIB de Navarra es el 17,85 por ciento, superando en más de un punto el fijado en los acuerdos con el Estado. Tampoco se ha cumplido el objetivo de necesidad de financiación, que lo fijaba en el 1,5 por ciento sobre el PIB. Los 311 millones que ha necesitado la Hacienda Foral para financiar sus gastos suponen un 1,72 por ciento del PIB.


Analizadas las cuentas, la Cámara de Comptos señala que, en general, expresan la imagen fiel del patrimonio, de la liquidación de sus presupuestos y de la situación financiera de la Administración Foral. No obstante, se apuntan dos salvedades: la falta de un inventario general de bienes y el hecho de que no se registren en el balance ni en la memoria las obligaciones del montepío de funcionarios.


Empresas públicas


En cuanto a las empresas públicas, existen 17 con un patrimonio neto de 850 millones y una deuda de 450 millones. A finales de 2013 contaban con una plantilla total de 1.040 profesionales, que respecto al año anterior ha disminuido en 73 trabajadores.


El informe señala que la aplicación de medidas de ahorro y ajuste implantadas por la CPEN están reduciendo sus resultados negativos y el volumen de deuda. Teniendo en cuenta el resultado global, las empresas públicas perdieron en el ejercicio 48 millones. Las mayores pérdidas son las de Sodena (14 millones) y CPEN (12,7 millones), correspondientes a correcciones sobre valoraciones de las participaciones en empresas. Destacan también las pérdidas de Navarra Infraestructuras de Cultura, Deporte y Ocio, con 9 millones, y Nasuvinsa, que perdió 6 millones. El mayor beneficio lo consiguió la sociedad Salinas de Navarra, con 1,3 millones.

www.parlamentodenavarra.es
• Publicación de la moción (BOPN, n.º 143, de 18-12-2014)