El Pleno del Parlamento ha rechazado hoy, con los votos en contra de PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e I-E, la enmienda a la totalidad formulada por Navarra Suma al Proyecto de Ley Foral de modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias que, con el ánimo de “mejorar la equidad y luchar contra el fraude fiscal”, ha presentado el Gobierno.

Al no prosperar la devolución, el proyecto de Ley será trasladado a la Comisión de Economía y Hacienda, donde este mismo viernes, día 14, comenzarán los trabajos dirigidos a conformar el dictamen que, previsiblemente, el día 19 será elevado a Pleno para su definitivo debate y votación. Concluido también el plazo para la presentación de enmiendas parciales, Navarra Suma ha registrado 26, PSN, Geroa Bai y Podemos-Ahal Dugu han suscrito conjuntamente 14, EH Bildu, 21 e I-E 13. En total, 74.

La enmienda a la totalidad con texto alternativo planteada por el G.P. Navarra Suma se sustentaba en la convicción de que el proyecto de Ley Foral de modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias resulta “continuista y, por tanto, alejado de la profunda reforma que conviene y demanda la Comunidad Foral, más aún tras la desaceleración económica que se observa en el mercado laboral, donde la “ralentización del ritmo de creación de empleo” corrobora el “cambio de tendencia respecto al sólido patrón de crecimiento de los últimos ejercicios”.

En ese contexto, Navarra Suma abogaab por “convertir la fiscalidad en herramienta de crecimiento” para, “dejando más capacidad económica en manos del sector privado, animar la actividad productiva, crear empleo de calidad y, a resultas de ello, ampliar las bases tributarias”. Todo ello en el marco de una “política económica anticíclica acorde con las nuevas condiciones macroeconómicas y sujeta al principio de equidad”.

El grupo mayoritario de la Cámara concluía insistiendo en sus críticas a las reformas fiscales del actual Gobierno, por considerar que, como las del anterior Ejecutivo, “exigen un mayor esfuerzo fiscal a las familias con hijos, a las rentas medias y bajas, y a las empresas, restando capacidad económica a las primeras y competitividad a las segundas”.

Al hilo de lo apuntado, Navarra Suma proponía deflactar un 5,8% (inflación acumulada desde 2015) la tarifa del IRPF (el Gobierno plantea un 2%), dejando el tipo máximo en un 48%, cuatro puntos por debajo de lo que rige en la actualidad. La aplicación de ese 5,8% se haría extensiva a todas las cuantías monetarias incluidas en las reducciones y deducciones establecidas en el Texto Refundido de la Ley Foral del IRPF, aprobado por el Decreto Legislativo 4/2008.

Asimismo, se elevaba 14.000 euros la obligación de presentar declaración, se reducían los tipos en todos los tramos y se aumentaba hasta 5.400 el mínimo personal pasivo.

A su vez, se establecía una deducción de 400 euros para familias numerosas, 600 en el caso de familias monoparentales y numerosas de categoría especial. Del mismo modo, se contemplaba un devengo de hasta 850 euros por cada hijo para familias numerosas y padres y madres trabajadoras (por cuenta propia o ajena), por las cantidades satisfechas a centros de educación infantil de 0 a 3 años.

Del mismo modo, se doblaban (de 500 a 1.000 euros) las compensaciones a los titulares de placas fotovoltaicas cuya potencia no supere los 100kw, se suprimía el límite de deducción en determinadas inversiones como las que atañen a vehículo eléctrico o sistemas de recarga (el límite era del 25%) y se introducían medidas para favorecer la atracción y el retorno del talento, “siempre que pasen a ser contribuyentes navarros en el año en el que cambien su residencia y en los cuatro siguientes”. Estarían exentos del 15% de los rendimientos íntegros de trabajo, pudiendo alcanzar el 20% con la consideración de otros gastos deducibles.

Navarra Suma proponía también disminuir los tipos a las rentas del ahorro, del 20% al 19% hasta 6.000 euros. Entre esa cantidad y los 50.000 cotizarían al 21% y a partir de esa cifra al 23%. Con la norma actual el tipo impositivo es del 2% hasta 10.000 euros, del 24% hasta los 15.000 y del 26% por encima de esa suma.

En lo relativo a planes de pensiones, Navarra Suma se mostraba favorable a recuperar la exención del 40% y a incrementar hasta 8.000 euros anuales (ahora son 3.500) la reducción máxima por aportación a esa fórmula de subsidio. La deducción de mayores de 60 años alcanzaría los 12.500 euros (ahora 6.000).

En el terreno del alquiler de vivienda, el texto alternativo de Navarra Suma sitúaba la deducción al arrendado (sin distinción del nivel de renta) en un 15%, hasta un límite de 1.500 euros anuales (300 más). En el caso de las familias numerosas y de los menores de 30 años (5 puntos más) la desgravación aumentaba al 25%, con un tope de 1.800 euros. Con el fin de “estimular el mercado de alquiler aflorando los arrendamientos ocultos”, la reducción fiscal alcanzaba también al dueño del piso”.

En el Impuesto de Sociedades, Navarra Suma defendía la reducción del tipo general del 28 al 24%, en el caso de las pequeñas empresas del 23 al 22%, fijando en el 19% el de las microempresas. Con los tipos mínimos de tributación se operaba en el mismo sentido, se reducía del 18 al 15%, del 16 al 13% en el caso de las pequeñas empresas y del 13 al 10% en microempresas. Además, se recuperaba el 100% de exención para la reinversión de los beneficios extraordinarios.

En el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, se elevaba el tramo exento hasta 350.000 euros, aplicando para el resto de la base el 0,8%.

Los grupos que sostienen al Gobierno de Navarra se han remitido a los principios que inspiran el proyecto de Ley para, desde el “compromiso con la equidad y la lucha contra la elusión fiscal”, desestimar la enmienda a la totalidad formulada por Navarra Suma.

En ese sentido, PSN, Geroa Bai, Podemos-Ahal Dugu e I-E han coincidido en subrayar que “la capacidad económica debe constituir la medida verdadera para distribuir las obligaciones tributarias”. Es por eso que “se ha considerado oportuno deflactar la tarifa aplicable a la base liquidable general del IRPF, al objeto de aligerar la carga fiscal que no se corresponda con un aumento del poder adquisito de los contribuyentes”.

EH Bildu, por su parte, se ha posicionado en las “antípodas fiscales” de Navarra Suma, cuya enmienda a la totalidad minoraría los ingresos de la Hacienda Foral en “200 o 300 millones”. La coalición soberanista se ha remitido al debate de las enmiendas parciales para concretar su posición, en todo caso partidaria de equilibrar la recaudación recuperando, entre otros, la eficacia del Impuesto de Sociedades, ahora mismo “en mínimos”.

· www.parlamentodenavarra.es
· Publicación del proyecto de Ley Foral (BOPN, n.º 39, de 21-11-2019)
· Publicación de la enmienda a la totalidad (BOPN, n.º 47, de 11-12-2019)