Publicada el Lunes, 11 de Noviembre de 2019

La Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión social presenta el informe anual correspondiente a Navarra

Aunque se percibe una cierta recuperación en los últimos cuatro años, los altos índices de precariedad sugieren un estancamiento y una cronificación de la pobreza en la Comunidad

La Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social ha presentado hoy en el Parlamento de Navarra los datos del noveno informe anual que, bajo el título de El Estado de la Pobreza. Seguimiento del indicador de pobreza y exclusión social en España 2008-2018, ha elaborado la Red Europea de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social (EAPN).

 

El estudio destaca que en 2018, según el indicador europeo AROPE, aproximadamente el 12,6% de la población navarra, unas 81.627 personas, viven en riesgo de pobreza y/o exclusión social, cifra que supone una leve reducción del 0,9% respecto al año anterior. De este total de personas, las mujeres siguen siendo las que mayor pobreza y/o exclusión social sufren siendo el 58%, frente al 42% de los hombres.

 

Según han explicado Amaia Leránoz y Gara González, presienta y vicepresidenta de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social, respectivamente, el impacto de la crisis socio-económica sufrida a nivel mundial desde el año 2009 se concentró en Navarra especialmente en los primeros años, en los cuales la tasa se elevó 5,9 puntos (desde el 8,6% de 2008 hasta los 14,5% de 2013). Aunque durante los últimos cuatro años se ha percibido una ligera recuperación, los altos datos de riesgo de pobreza y/o exclusión social sugieren un estancamiento y una cronificación de la pobreza.

 

"Hay un importante sector de la población que no está notando una mejoría en su situación, a pesar de la recuperación económica de los últimos años. Eso demuestra la necesidad de invertir en políticas públicas y en la redistribución de la riqueza generada, para que el crecimiento económico mejore la calidad de vida de todas las personas”, ha afirmado Jesús Garcia, miembro de la Comisión Permanente de la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social.

 

El indicador AROPE es una que tasa recoge una visión multidimensional de la pobreza y/o la exclusión social, en la que se contabiliza la población que se encuentra en riesgo de pobreza económica, con carencia material o baja intensidad en el empleo.

 

En el año 2018 el 8,3% de la población de la Comunidad Foral estaba en riesgo de pobreza económica. La cifra supone un incremento de seis décimas con respecto al valor del año anterior y rompe tres años consecutivos de reducción, de hecho en Navarra hay unas 57.000 personas en riesgo de pobreza económica, 4.000 más que el año pasado.

 

La tasa de pobreza severa revela que en Navarra, en el año 2018, 12.000 personas viven en hogares cuyos ingresos son inferiores a 370 euros mensuales. Dato que la Red valora positivamente, dado que 14.000 personas en Navarra dejaron de sufrir pobreza severa, rompiendo la tendencia de crecimiento paulatino anterior. Destacan la efectividad de algunas ayudas económicas, como la renta garantizada, aunque, inciden en que no pueden dejar de ser críticos y recordar que la tasa de pobreza ha crecido.

 

Un 8,1% de la población Navarra vive en hogares en los que los miembros en edad de trabajar lo hicieron menos del 20% de su potencial total de trabajo en el año anterior. Lo que supone que unas 39.088 personas residen en hogares con baja intensidad de empleo.

 

El informe alerta también sobre la privación material severa, personas (5,9% en Navarra) que viven en hogares con dificultad de acceso a determinados bienes y servicios. A ese respecto, Jesús García ha destacado que “el incremento sufrido en 2018 afecta especialmente a la población que no puede pagar debidamente los gastos de vivienda, que no pueden encender la calefacción para mantener su hogar a una temperatura adecuada y tampoco puede hacer frente a imprevistos”.

 

Ante estos datos, la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social destaca que “la pérdida de bienestar no es únicamente consecuencia de la crisis, si no de su combinación con políticas que no han demostrado la suficiente eficacia para contenerla, al menos, no para todas las personas”.

 

También marcan la urgencia de acometer medidas dirigidas a la mejora de las condiciones laborales y al acceso y mantenimiento de la vivienda de las personas en situación de exclusión social, temas clave que deben estar prioritariamente en la agenda política.

 

Recuerdan la necesidad de continuar con la alineación de las estrategias de desarrollo en Navarra con la Agenda 2030 y los 17 ODS (Objetivos de Desarrollo Sostenible) que contempla, para evitar un nuevo incumplimiento.

 

Por último, han solicitado el compromiso de los Grupos Parlamentarios para que trabajen en esta legislatura para “reducir, al menos en un 50%, la cifra de personas (81.000) quese encuentran en situación de riesgo de pobreza y exclusión, así como para “erradicar la situación de pobreza severa, que en 2018 ascendía a 12.000 personas”.

 

El Presidente del Parlamento de Navarra, Unai Hualde, ha subrayado el “firme compromiso de colaboración que el Parlamento mantiene con la Red Navarra de Lucha contra la Pobreza” y ha puesto en valor las políticas acometidas en los últimos años para “minimizar” las situaciones de precariedad. “En relación al resto del Estado, Navarra siempre ha tenido una buena situación, pero debemos seguir trabajando y debemos hacerlo mirando hacia otras zonas de Europa”.

 

La Red Navarra de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social surge en 1994 mediante la agrupación de 22 entidades sociales sin ánimo de lucro decididas a realizar un trabajo de colaboración y coordinación conjunto en pro de la inclusión social y la materialización de todos los derechos para todas las personas. Hoy reúne a 30 entidades y continúa ejerciendo de puente entre organizaciones sociales, instituciones y personas particulares.