Publicada el Jueves, 3 de Octubre de 2019

Rechazada la toma en consideración de la Proposición de Ley Foral de Navarra Suma para derogar la Reforma de la Administración Local

Los grupos que apoyan al Gobierno propugnan una prórroga de los plazos para clarificar cuestiones competenciales y financieras, mientras EH Bildu defiende la vigencia de la Ley

El Pleno del Parlamento de Navarra ha rechazado hoy, con los votos en contra de PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e I-E y el voto a favor de Navarra Suma, la toma en consideración de la proposición de Ley Foral por la que se deroga la Ley Foral 4/2019, de 4 febrero, de Reforma de la Administración Local de Navarra.

 

La proposición de Ley impulsada por el G.P. Navarra Suma cuestionaba tanto la “falta de consenso” como el objeto de una Ley que, lejos de solucionar la problemática derivada de la “excesiva atomización” del mapa local, compuesto por 272 municipios y 346 concejos, “amenaza la autonomía local, no resuelve su situación de insuficiencia financiera y choca con el principio de subsidiariedad”.

 

A tal fin, para evitar un “debilitamiento de Ayuntamientos y Concejos en detrimento de las Comarcas”, asegurar la prestación de servicios “desde la Administración más cercana” y promover el establecimiento de un sistema financiero “acorde a los principios de suficiencia financiera, sostenibilidad presupuestaria, solidaridad y equilibrio territorial”, se insistía en dejar sin efecto la reforma del mapa local.

 

La oposición de PSN, Geroa Bai, Podemos-Ahal Dugu e I-E, que han hecho suya la no conformidad del Gobierno, ha impedido la toma en consideración de la citada proposición de Ley, a la que también se ha opuesto, con criterios diferentes, EH Bildu.

 

A decir de los grupos que sostienen al Ejecutivo Foral, “para hacer posible un desarrollo normativo coherente y consensuado, que vaya más allá de la mera derogación y resuelva los importantes aspectos a los que no se da solución”, se hace imprescindible una prórroga de los plazos establecidos en la Ley Foral 4/2019 “hasta el 31 de diciembre de 2020 y, si se considera necesario, hasta el 31 de diciembre de 2021”.

 

Dicha moratoria, asì se precisa, viene exigida por la nueva composición municipal y política tanto de los Ayuntamientos afectados, como del Parlamento y la Federación Navarra de Municipios y Concejos (FNMC).

 

Entre los cambios a estudiar para, según se aduce, solventar las lagunas de la Ley 4/2019 se citan la clarificación competencial, la financiación, la situación del personal de Secretaría e Intervención, la elección de los miembros de la Asamblea Comarcal, así como el encuadre legal de los diferentes entes locales. Todo ello sin perjuicio de la posibilidad de “desarrollo anticipado” de aquellas materias en las que se alcance el “amplio consenso que una norma de estas características exige”.

 

EH Bildu, por su parte, ha defendido la vigencia y el alcance de una Ley que, “aun con aspectos pendientes de desarrollo”, responde a una “concepción actualizada” de la Administración Local, incluido el “suelo de financiación ya contemplado y del que nadie habla”.

 

La Ley 4/2019 plantea la reorganización territorial de la Comunidad a partir de la creación de 12 comarcas llamadas a integrar las actuales mancomunidades sectoriales, las agrupaciones de servicios administrativos y otras entidades supramunicipales. Todo ello acompañado de un “nuevo modelo de financiación y una mayor claridad en la distribución de competencias”.

 

La reforma, según se acordó, pretende la implantación de un marco sobre el que apuntalar los profundos cambios que se irán acometiendo en las entidades locales de Navarra una vez modificadas las principales leyes reguladoras de la Administración Local. A partir de ahí, se abrirá un período de cambios normativos que irán concretando de forma definitiva la nueva estructura territorial.

 

El Pleno del Parlamento de Navarra aprobó el 31 de enero de 2019 la Ley Foral 4/2019, de 4 febrero, de Reforma de la Administración Local de Navarra. Lo hizo con los votos a favor de sus impulsores, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos-Ahal Dugu e I-E. UPN, PSN y PPN se posicionaron en contra.