La Comisión de Economía, Hacienda, Industria y Empleo ha aprobado hoy el dictamen en relación con las propuestas relativas a la modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias, estudiadas y debatidas en el seno de la ponencia constituida al efecto.

El dictamen recoge los cuatro informes aprobados por mayoría en la ponencia y que se corresponden con la proposición de Ley Foral de modificación del Texto refundido de la Ley Foral del IRPF, el proyecto de Ley Foral de modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias, la proposición de Ley Foral de modificación del artículo 28 de la Ley Foral 13/1992 del Impuesto sobre el Patrimonio y la propuesta de aprobación de una Ley Foral reguladora del Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica.

También se ha aprobado, a propuesta de Izquierda-Ezkerra, la realización de un estudio exhaustivo dirigido a cuantificar la economía sumergida y el fraude fiscal en Navarra. Se otorga al Gobierno de Navarra un plazo de un año.

La ponencia ha rechazado por unanimidad la proposición de modificación de la Ley Foral 19/1992 del Impuesto sobre el Valor Añadido, presentada por el G.P. Socialistas de Navarra. También ha rechazado las proposiciones de Ley Foral sobre medidas fiscales y modificación de diversos impuestos presentadas por los grupos Bildu y Nabai, por un lado, e Izquierda-Ezkerra, por otro. Éstas, sin embargo, se han incorporado al informe de la ponencia y se han mantenido para su debate y votación en Comisión, donde han sido rechazadas con los votos en contra de UPN, SN y PPN y los votos a favor de Bildu, Nabai, I-E y el parlamentario no adscrito.

La modificación del Texto Refundido de la Ley Foral del IRPF, aprobada con los votos a favor de UPN, SN y PPN y el rechazo de Bildu, Nabai, I-E y el no adscrito, persigue “mejorar su progresividad” aumentando la tributación de las rentas más altas (del 49 al 52% las superiores a 300.000 euros, del 49 al 51% entre 175.000 y 300.000 euros, y del 46,5 al 47% entre 53.407 y 88.000 euros) y de los rendimientos de capital superiores a 24.000 euros (del 26 al 27%).

Con las correcciones introducidas se opera un acercamiento respecto a los márgenes imperantes en el resto del Estado, donde el tipo impositivo más alto para el IRPF es del 54% (2 puntos por encima), siendo del 27%, como se propone ahora en Navarra, para las rentas del capital, que en la Comunidad Foral seguirán grabando un punto por debajo en los tramos inferiores, el 20% hasta 6.000 euros y el 24% hasta 24.000.

En cuanto a la deducción por vivienda, la enmienda introducida por el grupo socialista modera la reducción que recogía inicialmente el proyecto de Ley Foral, con la que el Gobierno pretendía recaudar unos 26 millones, “17 de ellos a costa de las rentas medias-bajas”.

Así, con la enmienda aprobada por UPN, SN y PPN (el resto en contra) se modifica la base máxima de la deducción anual por adquisición o rehabilitación de vivienda que constituya domicilio habitual, elevándola de 6.000 a 7.000 euros. Y se incrementa de 18.000 a 20.000 euros, con carácter general, y de 20.000 a 22.000, en el caso de familias numerosas, el importe de la suma de bases que dan derecho a aplicar dicha deducción.

En tributación conjunta, para el acceso a la deducción en vivienda se elevan las sumas de bases de 36.000 a 40.000 euros con carácter general y de 40.000 a 44.000 para familias numerosas. La base máxima de deducción anual en tributación conjunta se eleva de 13.000 a 15.000 euros

Además, se establece un gravamen complementario para 2013, tanto respecto a la tarifa de la base liquidable general como de la base liquidable especial del ahorro. Quedan exentas las viviendas adquiridas o rehabilitadas antes del 1 de enero de 2013, así como las obras iniciadas y las cantidades abonadas antes de esa fecha, siempre que la suma de bases del período impositivo sea igual o superior a 20.000 euros anuales, en cuyo caso podrá seguir aplicando la deducción por vivienda con arreglo a las condiciones y requisitos vigentes a 31 de diciembre de 2012.

En el ámbito del alquier, se prevé una deducción del 15%, hasta un máximo de 1.200 euros anuales, por los pagos de arriendo para domicilio habitual. Esta enmienda ha sido aprobada por unanimidad.

 En otro orden de cosas, se introduce un gravamen especial sobre premios de determinadas loterias y apuestas, cuyo importe íntegro sea superior a 2.500 euros y siempre que la apuesta o la cuantía del décimo, fracción o cupón de lotería sea de al menos 0,50 euros.

Por otra parte, se establecen beneficios fiscales para las personas o entidades emprendoras y para quienes inviertan en éstas. Se considerará emprendedora aquella actividad empresarial o profesional que no haya sido ejercida bajo otra titularidad, en todo o en parte, en los 5 años anteriores.

La modificación del artículo 28 de la Ley Foral 13/1992 del Impuesto sobre el Patrimonio, aprobada con los votos a favor de SN, Bildu, Nabai, I-E y el no adscrito y los votos en contra de UPN y SN, reduce el mínimo exento de 700.000 a 311.023 euros, manteniendo liberada la vivienda habitual hasta un valor de 250.000 euros.

El proyecto de Ley Foral de modificación de diversos impuestos y otras medidas tributarias, aprobado con los votos a favor de UPN, SN y PPN, los votos en contra de Bildu, Nabai e I-E y la abstención del no adscrito, mantiene, con retoques, los cuatro incentivos principales del Impuesto sobre Sociedades. Así, continúa como elemento básico la exención por reinversión, se flexibiliza la reserva especial para inversiones, se reduce la cuantía para la deducción por inversión en activos fijos nuevos (se exige una cuantía mínima) y se supedita la deducción por creación de empleo al mantenimiento de la plantilla durante 12 meses.

Por otra parte, se establecen nuevas limitaciones para la deducción de los gastos financieros y la compensación de las bases liquidables negativas de años anteriores, instrumentos con los que se espera un incremento recaudatorio de en torno a 18 millones.

Como novedad, también dentro del apartado de deducciones en el Impuesto de Sociedades, se amplia al 15%, cinco puntos más si se trata de instrucción en idiomas, la deducción por la realización de actividades de formación profesional.

Del mismo modo, se introduce la deducción por fomento de la exportación, de modo que las empresas que incrementen su ratio de exportación tendrán derecho a multiplicar por 1,1 (las pymes por 1,25) las deducciones generadas en el ejercicio de referencia. Para ello, el porcentaje de sus ventas fuera del Estado deberá superar en 5 puntos las del ejercicio anterior (sobre la totalidad de sus ventas anuales) o bien sus exportaciones deberán incrementarse un 10% en relación a las del año anterior.

La propuesta de Ley Foral reguladora del Impuesto sobre el Valor de la Producción de la Energía Eléctrica, aprobada por unanimidad, introduce una tasa en cuya exacción será de aplicación la normativa estatal que lo regule, con las siguientes salvedades: el tipo impositivo lo fijará el Estado; quedarán exentos los titulares de instalaciones de producción eléctrica de carácter renovable, cuya potencia instalada no supere los 25kWp; también quedarán exentos, durante 5 años, los titulares de instalaciones de energías renovables que renueven los equipos de producción por otros nuevos de mayor rendimiento.

La proposición de Ley Foral sobre medidas fiscales y modificación de diversos impuestos propuesta por Bildu y Nabai (rechazada con los votos en contra de UPN, SN y PPN) planteaba una serie de medidas de urgencia tales como limitar las deducciones en el Impuesto de Sociedades, aumentar la tributación de las rentas más altas o unificar las rentas del capital y del trabajo en una misma base tributaria.

En lo que al IRPF hace referencia, proponían aumentar el tipo máximo de tributación del 49 al 56 %, incorporar cuatro nuevos tramos y unificar en una sola base tributaria las rentas de trabajo y las rentas del capital, además de reducir a 200.000 euros el máximo deducible por vivienda.

En cuanto al Impuesto de Sociedades, proyectaban limitar al 25% el máximo deducible y, por otro lado, reducir de 15 a 3 años el plazo de las empresas para las liquidaciones compensatorias por pérdidas. El fin último era acabar con la “maraña de bonificaciones, deducciones y desgravaciones” que, unido al “descenso de los tipos impositivos”, permite a las empresas tributar a un tipo que está a “años luz del establecido en la norma”.

Del mismo modo, pretendían la eliminación del tratamiento específico de las Sociedades de Inversión Colectiva de Capital Variable (tributan al 1 %), para que tributasen dentro del Impuesto de Sociedades. Y la derogación de la exención contemplada para éstas en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados para operaciones de constitución y aumento de capital.

Desechada con los mismos apoyos (Bildu, Nabai, I-E y el no adscrito), la proposición de Ley Foral de medidas fiscales y modificación de diversos impuestos de Izquierda-Ezkerra tenía por objeto “mejorar la progresividad del sistema fiscal y su capacidad recaudatoria”, imponiendo para ello un mayor gravamen a las rentas altas y de capital, a las grandes fortunas y a los beneficios empresariales, con el fin de paliar las “graves dificultades de financiación de las políticas públicas y los servicios sociales básicos”.

En esa dirección, sugería aumentar los tipos impositivos del IRPF para bases liquidables generales superiores a 45.480 euros anuales, hasta un tipo máximo del 56%, frente al 49% vigente, para bases superiores a 300.000 euros.

A su vez, planteba un aumento de la presión fiscal a las rentas de capital superiores a 6.000 euros anuales, llegando a un tipo impositivo del 33%, frente al 27% vigente, para rentas de capital superiores a 24.000 euros anuales.

La proposición de Ley de I-E enunciaba también un aumento del tipo general del Impuesto sobre Sociedades del 30% al 35%, manteniendo el tipo vigente del 27% para las pequeñas empresas.

Y pretendía eliminar el tipo del 1% vigente para las Sociedades de Inversión de Capital Variable (SICAV).

A la sesión, presidida, por Pedro Rascón (SN), han asistido, por el G.P. UPN, Carlos García Adanero, Esteban Garijo, Antonio Pérez Prados, Coro Gainza, Amaya Otamendi y María Victoria Castillo; por el G.P. SN, Samuel Caro y Juan José Lizarbe; por el G.P. Nabai, Juan Carlos Longás y Txentxo Jiménez; por el G.P. Bildu, Bikendi Barea y Maiorga Ramírez; por el G.P. PPN, Ana Beltrán; por el G.P. Izquierda-Ezkerra, José Miguel Nuin; y Manu Ayerdi, parlamentario no adscrito.